automovilismo
Google Cloud y Fórmula E: frenado regenerativo e inteligencia artificial logran hazaña energética histórica en Mónaco
El auto GENBETA de Fórmula E completa una vuelta al circuito de Mónaco con energía generada solo por frenado regenerativo, gracias a la IA de Google Cloud. Un hito en eficiencia y movilidad eléctrica
El proyecto “Mountain Recharge” demuestra el potencial de la IA y el frenado regenerativo en el automovilismo eléctrico
MONTECARLO, MÓNACO – 3 de mayo de 2025 — En una demostración sin precedentes de innovación tecnológica, el prototipo GENBETA de Fórmula E logró completar una vuelta entera al circuito de Mónaco impulsado únicamente por energía recuperada a través del frenado regenerativo. Esta hazaña fue posible gracias a la inteligencia artificial de Google Cloud, marcando un hito para el deporte y la tecnología automotriz.

Inteligencia artificial y gravedad: la fórmula del “Mountain Recharge”
El desafío consistió en descender más de mil metros verticales por el Col de Braus en los Alpes franceses, sin usar el motor del auto para impulsarse. En modo “libre” y con energía mínima solo para los sistemas electrónicos, el GENBETA —conducido por James Rossiter, piloto de pruebas de la Fórmula E— logró generar entre 1.6 y 2.0 kWh de energía. Esto fue suficiente para recorrer los 3.337 km del circuito urbano de Mónaco, todo gracias a un uso óptimo del frenado regenerativo.
Para dimensionarlo, esta cantidad de energía permitiría recargar por completo casi 60 teléfonos Google Pixel 9 Pro XL.
Tecnología de Google Cloud en cada paso
El proyecto fue posible gracias a una integración avanzada de herramientas de análisis y desarrollo de Google Cloud:
Google AI Studio con Gemini API
Se empleó para planificar la ruta óptima y analizar variables como peso, velocidad, fuerzas gravitacionales y zonas de frenado. Esta plataforma permitió generar un modelo predictivo y ajustar dinámicamente los ángulos de conducción para maximizar la regeneración.
BigQuery
Esta solución de datos unificada y sin servidor almacenó y analizó en tiempo real la telemetría del auto, proporcionando información crítica para el monitoreo y evaluación del descenso.
Firebase
Sirvió para desarrollar y alojar una aplicación de visualización de datos en tiempo real, accesible desde Chromebooks y dispositivos Pixel, brindando a los ingenieros un tablero de control eficiente e intuitivo.
NotebookLM
El asistente de investigación y escritura por IA consolidó datos técnicos, logísticos e ingenieriles, facilitando la colaboración entre los equipos de Google Cloud y Fórmula E a lo largo del ciclo de vida del proyecto.
Una colaboración que va más allá de las pistas
Este proyecto forma parte del desarrollo continuo de la plataforma GENBETA, una iniciativa que busca empujar los límites del rendimiento y la eficiencia en el automovilismo eléctrico. Además de Google Cloud, participaron socios estratégicos como ABB, Hankook y SABIC, aportando su experiencia en infraestructura eléctrica, neumáticos de alto rendimiento y materiales compuestos.
“No es solo una historia llamativa de carreras, es una prueba del impacto real de la inteligencia artificial y la regeneración energética en la movilidad del futuro,” — Alex Aidan, vicepresidente de marketing de Fórmula E.
“Modelamos la física del descenso y maximizamos el potencial regenerativo, demostrando cómo la IA transforma datos en decisiones inteligentes.” — Guillaume Roques, director senior de marketing para EMEA en Google Cloud.
¿Por qué importa esta hazaña?
En las carreras de Fórmula E, hasta el 40% de la energía utilizada durante una competencia se recupera mediante el frenado regenerativo. Esta demostración no solo reafirma la viabilidad técnica de este principio, sino que también apunta a un futuro donde la optimización energética mediante IA sea aplicable a vehículos de calle, flotillas de reparto y ciudades inteligentes.
El futuro del automovilismo es eléctrico, inteligente y colaborativo
La Fórmula E continúa consolidándose como el laboratorio de innovación más relevante para la movilidad eléctrica. Este reto “Mountain Recharge” no solo fue una proeza técnica y deportiva, sino una validación concreta de cómo las tecnologías en la nube pueden cambiar la movilidad global, transformando la ciencia de datos en acción sustentable.